El candidato de Massa no logró el mínimo requerido en las PASO porteñas y Das Neves entrega a los suyos para despegarse
Se sigue diluyendo la campaña nacional del tigrense al cual Mario Das Neves eligió como su referente para la Presidencia de la Nación. Guillermo Nielsen, precandidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires apenas logró el 0,9 por ciento de los votos y no podrá participar de las elecciones generales. El líder de ChuSoTo ensaya piruetas para zafar y le suelta la mano a sus seguidores. Scioli echó por tierra todos los rumores y reafirmó su compromiso con la reelección de Buzzi, mientras que desde el PRO dijeron que “el dasnevismo no reúne las condiciones para llegar a un acuerdo en la provincia”. El exgobernador, cada vez más solo.
La tarde del domingo debe haber estado acompañada de un mal trago para Mario Das Neves, que ve como el proyecto nacional de Sergio Massa, su candidato, se hunde aceleradamente. Ahora, el papelón electoral en la Ciudad de Buenos Aires se suma a la incómoda posición de ChuSoTo y lleva a su líder a una estrategia desesperada en la cual incluso le da la espalda a su propia gente.
Lo que hace unos meses parecía ser una carrera sin escalas hacia la Presidencia de la Nación se transformó en una pesadilla para Sergio Massa. Esta vez, su elegido para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no podrá ser parte de los comicios generales, tras obtener un magro 0,9 por ciento de los votos y quedar por debajo de lo que la ley requiere para participar.
El papelón de Guillermo Nielsen como precandidato porteño resulta significativo, ya que se da en un distrito donde Sergio Massa goza de alto nivel de conocimiento. A la vez, confirma que el massismo no logra dar pie con bola en su armado a nivel país, al cual Mario Das Neves fue uno de los primeros en adherir con fervor. Incluso, trayendo al tigrense a Chubut en reiteradas ocasiones, en un intento por darle volumen político nacional al proyecto de ChuSoTo.
Sin lugar a dudas, esta serie de traspiés del massismo encendió las luces de alarma en los cuarteles generales del chusotismo, que ahora deben ensayar todo tipo de piruetas para zafar. Incluso, poniendo en juego la lealtad del jefe supremo (Mario Das Neves) a su joven candidato a Presidente y a sus propios seguidores en Chubut. Una maniobra tan cuestionable como propia de quienes entran en desesperación.
Allí debe encontrarse la explicación a las versiones que hoy colman la columna de análisis del diario El Chubut, donde anuncian que el otrora promisorio candidato a vicegobernador, el escribano-dandy Mariano Arcioni, bajará a la intendencia de Comodoro Rivadavia; o especulan con un posible doble juego de Daniel Scioli y con contactos subterráneos del dasnevismo en busca de un palenque donde rascarse.
En un intento por salvarse, Das Neves parece decidido a entregar a su propia gente. No se trata de un “sálvese quien pueda” sino de un “veamos cómo me salvo yo”. Caiga quien caiga y al precio que sea.
Pero el propio Scioli hoy fue taxativo al confirmar su adhesión al proyecto reeleccionista de Martín Buzzi, reivindicando la apuesta formulada por el chubutense en pos de sus intenciones presidenciales y subrayando que “la lealtad es un camino de ida y vuelta”. Un mensaje que debe estar decodificando Das Neves, y que no sólo significa una negativa ante las versiones que busca instalar sino algo que también habla de su propia actitud ante el massismo.
Por si esto fuera poco, también desde el PRO le cerraron las puertas a Das Neves y su ChuSoTo. “El dasnevismo no reúne las condiciones para llegar a un acuerdo en la provincia”, dijo Enrique Braun, presidente de la Junta Promotora de ese espacio en Chubut, en declaraciones que reproduce el sitio El Comodorense.
“Nosotros tenemos un candidato a gobernador que es Ricardo Irianni y ese va a ser nuestro candidato a gobernador, de acá hasta que nos presentemos en las elecciones, después veremos si se conforma un espacio con el radicalismo para competir en las PASO, pero el dasnevismo no reúne las condiciones que busca el PRO”, señaló el dirigente del macrismo.
En este contexto, a Das Neves las cosas se le tornan cada vez más difíciles. Con un candidato a Presidente que se diluye minuto a minuto, aparentemente sin candidato a vicegobernador, elogiando a los nombres de los posibles postulantes a senador del Frente para la Victoria, y postergando ya sin fecha la tan anunciada presentación de sus elegidos para las intendencias, el dasnevismo y el massismo están unidos por la soledad y la confusión.
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