sábado, 17 de octubre de 2015

A su paso por Madryn, Das Neves volvió a dejar en claro que el suyo es un proyecto personal

“Sastre es el intendente que yo necesito para Madryn” dijo el führer del Chusoto, mostrando así su desprecio por la voluntad de los ciudadanos. Otra expresión desafortunada luego del autoritario “yo te puse, yo te saco”. El pez por la boca muere.

“Ricardo Sastre es el intendente que yo necesito para Puerto Madryn” afirmó ayer el cacique chusotista Mario Das Neves durante un acto realizado en la ciudad del Golfo. En tan pocas palabras, sentó posición respecto a la manera en la que ve la política, dejando en claro que en su proyecto lo único que tiene importancia son sus deseos personales, más allá de la voluntad de los ciudadanos.

El führer del ChuSoTo llegó a Puerto Madryn por segunda vez en pocos días, decidido a tirarle una soga al candidato al que en su momento quiso entregar obligándolo a adelantar las elecciones, quien a partir de una gestión llena de cuestionamientos y desaguisados financieros terminó perdiendo en las PASO contra el candidato del Frente para la Victoria. Así, en su intento por revivir a Sastre, terminó ratificando aquello de que “el pez por la boca muere”.

Porque a partir de los dichos de Das Neves, que hoy reproducen profusamente los medios de toda la provincia, queda en claro que los madrynenses no deberían votar al candidato de su preferencia, sino al que necesita el chusotista mayor. Al menos, según el esquema mental del lonko del ChuSoTo, cuyos dichos bien podrían traducirse de esa manera.

Es fácil caer en la tentación de transformarse en un psicólogo amateur e inscribir este lapsus linguae en el campo de los actos fallidos (también conocidos como deslices freudianos), tal como denomina la teoría a aquellos actos que ponen de manifiesto una expresión diferente o incluso contraria a la intención consciente del sujeto.

Pero también resulta simple llegar a la conclusión de que no hubo nada de inconsciente en las expresiones autorreferenciales de Das Neves, sino que en todo momento quiso decir lo que dijo. No son pocos los intendentes que recuerdan como el ahora caudillo del ChuSoTo asignaba obras públicas, desoyendo los pedidos de las localidades y decidiendo él sólo qué era lo que necesitaba cada pueblo. “No importa si necesitan una escuela. Yo necesito que tengan un SUM”, era el leitmotiv de aquellos años.

Esta marcada intención de Das Neves de dejar en claro que lo único que importa es lo que él necesita se refuerza cuando repasamos sus declaraciones de un par de días antes. Más precisamente aquello de “yo te puse, yo te saco”, todo un canto al personalismo y la megalomanía que atraviesan a los personajes que creen estar predestinados.

En definitiva, lo que dijo Das Neves en Madryn es otra confesión de la forma personalista de concebir la política que tiene el führer chusotista, a quien ya no le basta con entregar a sus propias huestes ni ir con una boleta corta que deja expuesto el carácter solitario de su proyecto, sino que ahora necesita hacer explícitos sus no tan profundos pensamientos. Un dato que, a poco más de una semana de las elecciones, habla del nerviosismo que impera en el ChuSoTo.

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