ChubutEnOn

El hijo de Das Neves admitió que el ChuSoTo es un proyecto familiar

En una desopilante entrevista por LU20, Pablo Das Neves se quedó sin argumentos para defender al partido fundado por su padre, que le da trabajo a él, a su madre, a su tía, a su hermana y a su cuñado.

El pez por la boca muere. Nunca vino mejor tener a mano esta remanida frase tras escuchar a Pablo Das Neves por la radio LU 20 de Trelew, donde el periodista Carlos Di Filippo le preguntó si el ChuSoTo era un proyecto familiar. Este simple interrogante dejó al voluminoso hijo de Das Neves, que se jacta de acumular títulos y saberes, sin ninguna respuesta.

Lejos de desmentirlo, el hijo del creador y único cacique del ChuSoTo prefirió decir que esta era una acusación “para hacerlo subir al ring” y contraatacó buscando parentescos entre los dirigentes de otras fuerzas políticas. Pero, mientras lo hacía, se olvidó de que estaba hablando de varias familias desparramadas en espacios políticos que no le pertenecen a ninguna en particular.

A medida que avanzaba en sus dichos, quedaban más en evidencia las diferencias. Pablo .que es concejal de Trelew por el ChuSoTo e hijo del ex gobernador, diputado y precandidato Mario y de la diputada provincial Raquel Di Perna, sobrino de la senadora nacional Graciela Di Perna, hermano de la asesora en la Cámara de Diputados de la Nación Mariví, y cuñado del empleado categoría 1 del Senado de la Nación Federico Verdeau- no pudo explicar por qué en su partido el único apellido que se repite permanentemente es el de los Das Neves.

Porque, cabe recordar, cuando el führer chusotista era gobernador estos mismos personajes ocupaban cargos públicos. La tía Graciela era secretaria de Salud, el pequeño Pablo subsecretario de Gobierno, el cuñado Fede subsecretario de Desarrollo Social y se cuenta que la hermanita Mariví no tenía cargo pero andaba metida por todos lados.

Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio. En definitiva, son formas de concebir la política. Ya lo confesó el propio Das Neves (Mario) cuando afirmó que su modelo era el Movimiento Popular Neuquino, ese que durante medio siglo perpetuó el apellido Sapag. Es decir, una forma de gobernar donde las decisiones se toman en la mesa de los domingos, mientras todos le entran a los ravioles.