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Para Das Neves solamente se hace lo que él dice, no importa lo que piensen los vecinos

El führer del ChuSoTo dijo que “ni loco” continuaría con “Casa Abierta” porque para él “avasalla la autonomía de los municipios”. Sin embargo, varios de los intendentes de su espacio político estuvieron en las ediciones de este programa que se desarrollaron en sus localidades. Para el cacique chusotista, escuchar a los vecinos es algo malo.

En una entrevista que brindara días atrás al programa “A Tiempo”, por la radio FM Tiempo 91.5 de Trelew, el cacique chusotista Mario Das Neves avisó que le daría la espalda a los vecinos y no los recibiría, ya que durante su cada vez más hipotética tercera gestión dejaría sin efecto el programa “Casa Abierta”.

“Ni loco lo continuaría. Hablan de Casa Abierta, pero no de cómo avasallaron a la autonomía de los municipios. Se ha naturalizado que está bien Casa Abierta sin pasar por los municipios”, declaró el diputado que llegó al Congreso junto al PACh, partido al que luego abandonó para armar su ChuSoTo.

Son muchos los intendentes que no piensan lo mismo y se suman gustosos cuando el gobernador Martín Buzzi y su equipo visitan sus localidades para recibir a los vecinos. Incluso, algunos intendentes del ChuSoTo en los hechos demostraron que no están de acuerdo con lo que piensa su führer.

El caso más emblemático de intendentes chusotistas compartiendo “Casa Abierta” con el Gobernador podemos encontrarlo el 13 de septiembre de 2014, en Trelew, cuando no sólo Máximo Pérez Catán sino también el madrynense Ricardo Sastre estuvieron en la Escuela 751.

A otro que se lo vio varias veces fue al neochusotista Rafael Williams, o al intendente de Tecka, Jorge Seitune, también alineado con el partido familiar de los Das Neves. Y, por supuesto, fueron muchísimos más los intendentes de otras extracciones políticas donde no existe el temor a la represalia del jefe que se acercaron a “Casa Abierta” en sus respectivas localidades.

Porque, a decir verdad, no hay nada de malo en la propuesta del gobernador de sentarse y escuchar en boca de los vecinos cuáles son las necesidades de cada uno y buscar la manera de resolverlas de forma rápida. Esto no excluye para nada a los intendentes y representa un acto de valentía por parte de Buzzi (y, por supuesto, de los funcionarios municipales que se suman), ya que luego de escuchar cada reclamo no puede refugiarse en echarle la culpa a otro o decir que no estaba enterado, como seguramente haría Das Neves luego de enterrar “Casa Abierta”.

En su campaña chata de ideas y abundante en descalificaciones, Das Neves cometió el sincericidio de avisar que, si llega, el 11 de diciembre se acabaron las charlas con los vecinos. Que otro se ocupe de los problemas, mientras él vuelve a moverse rodeado de una corte de aduladores que le acomodan el micrófono y lo aíslan de la realidad. Como el monarca que siempre soñó ser.